Se han publicado muchos posts sobre nuestros queridos V12: sobre los que hay el Foro, sobre los que se matricularon nuevos y quedan rodando por España, sobre las cosas que les vamos haciendo... Pero no hemos dicho nada sobre las razones que nos llevaron a hacernos con uno de ellos.
Por esa razón os pregunto: ¿porqué habéis comprado un V12?
Para romper el hielo os contaré mi experiencia: desde que era pequeño y adolescente siempre me ha encantado el XJ Serie III; con los años el coche me gustaba más y más hasta que empecé a meterme en el tema de los coches clásicos hace unos veinte años; al empezar a hacer amigos que coleccionaban y que reparaban este tipo de coches pude concocerlos de primera mano.
Hace bastante años un buen amigo se hizo con el XJ12 que ahora es mío; reconozco que el coche me gustaba, pero en ese momento tampoco me había planteado muy en serio hacerme con él, lo veía como algo lejano y un poco fuera de mi alcance; además, al no haber conducido nunca ninguno no tenía claro si sería el tipo de coche que me gustaría.
Cuando tuve la oportunidad de empezar en serio con el tema de los clásicos me compré el BMW 635CSi y lo restauré; con eso colmé mis ambiciones y empecé a disfrutar de él en grandes viajes y concentraciones. Sin embargo, me apetecía comprar un coche de lujo de cuatro puertas potente y automático. Había conducido los MB de la Clase S W126 y reconozco que me encantan, pero les falta ese toque tan especial que tienen los Jaguar; los Clase S W140 los veía muy grandes y demasiado modernos; los BMW de la serie 7 (a partir del E23) no me apetecían al tener ya un coche de la marca, aunque los motores BMW me encantan por su carácter; y de italianos, aunque pude tener alguna oportunidad, me daban algo de miedo por el tema de los recambios y su relativa fiabilidad... De ese modo la elección se debía centrar en coches ingleses, y como siempre me habían encantado los Jaguar XJ de la Serie III la cosa estaba clara. Sólo faltaba encontrar un coche ajustado a mi presupuesto.
Así las cosas un buen día tuvimos en Electromóvil, taller con el que colaboro, un XJ12 como el mío, pero en un estado perfecto: tuve la oportunidad de rodar con el coche unos kilómetros, y reconozco que la experiencia me marcó! A grandes rasgos el coche me pareció tan suave como los Rolls y Bentleys que he conducido y que tocamos en el taller, con un empaque y una clase impresionante, pero claramente más manejable y deportivo. El bufido del motor, la sensación de poderío, la finura de funcionamiento, el precioso tablero, su elegante línea hicieron nacer el deseo de tener uno. Además, la sensación al volante me encantó, me ví cómodo con él, con sus reacciones, con su carácter...
El destino quiso que unos años después pudiera hacerle un reportaje a un XJ6 Sovereign, también Serie III, que publiqué en la revista valenciana Gran Turismo. Este coche pude rodarlo más y he de reconocer que disfruté mucho; si las primera vez que rodé un V12 me marcó ésta segunda experiencia me reafirmó en mi deseo de tener uno.
Tenía claro que quería un V12, porque -tal vez sea una sensación muy subjetiva- el motor 4.2 del XJ6 no me parecía mucho má potente que mi BMW 635CSi y quedaba un poco castrado por su caja de cambios automática. No me gusta correr más de la cuenta, pero me gusta la sensación de ir sobrado de caballos, tal y como me ocurre con el BMW, y pude ver que el XJ6 iba un pelín justo de potencia-prestaciones para mi gusto.
Poco tiempo después pude convencer a mi amigo para hacerme con su coche; aunque me lo dejaba muy barato me tocó pelearme algo con él porque no me lo quería vender aduciendo que llevaba mucho tiempo parado y había que hacerle muchas cosas; sin embargo, como soy cabezón al final me hice con el coche. Como tenía claro que tendría que hacerle un buen repaso no me preocupaba tanto su estado de conservación como que estuviera sano y libre de corrosión; afortunadamente, el motor sonaba fino, la carrocería estaba bien, libre de corrosión en las zonas críticas y sin golpes, y con los interiores en bastante buen estado, aunque un poco abandonado; era una buena base para recuperar el coche y dejarlo a mi gusto.
Me imagino que a vosotros os habrá pasado lo mismo, pero al principio me imponía mucho respeto un V12, por el mantenimiento, por el consumo, por el cómo será el día a día con él... Afortunadamente, después de haber restaurado el BMW ya sabía más o menos lo que me esperaba; sabía que la inversión económica sería seria, pero tenía claro que para disfrutar de verdad un coche antes hay que dejarlo en condiciones, y que ello supone un sacrificio importante; pero una vez que se pasa por el mal trago, a disfrutarlo!
En cuanto al tema de los consumos, sabemos que estos motores grandes son glotones en tráfico urbano, pero que en viajes largos, a velocidades constantes en las que el motor gira a pocas revoluciones, la cosa cambia algo; siempre gastarán, pero ya se tratará de cifras razonables, siempre y cuando no abusemos de la potencia que eroga el motor.
Tener un buen equipo técnico por detrás (Electromóvil), un potente archivo técnico sobre este coche, una concesión oficial que responde muy bien para todo el tema de recambios (Británica) y paciencia han hecho muy llevadero el tema de su puesta a punto. Y por supuesto, bastante dinero para gastar.
Saludos

Juan