SUSPENSIÓN DELANTERA Y DIRECCIÓN XJ12 SERIE III
Publicado: 24 Nov 2011 09:01
Hola a todos,
Os comento las últimas cosas que le hemos hecho al coche:
En esta ocasión hemos vuelto a la suspensión delantera, en particular a los casquillos de goma sobre los que gira el eje del brazo inferior de la suspensión; estos casquillos (lleva dos por cada brazo) estaban muy degradados y puede que fueran la causa de las molestas vibraciones que se transmitían al volante; yo pensé que estaban causados por el estado de las ruedas, algo deformadas y rígidas por la falta de uso, pero viendo su estado creo que algo tendrán que ver. Cuando saque el coche del taller, y tras alinear y equilibrar las ruedas podré rodarlo para comprobar si desaparece o no esta vibración. Mi BMW tuvo síntomas parecidos y reemplazando todos los silentblocks el cambio fue notable, con la dirección más fina y suave.
Para sacar estos casquillos nos ha tocado desarmar completamente la suspensión y dirección: nos ha tocado sacar ruedas, muelles, amortiguadores, desmontar bieletas de la dirección, y manetas de las ruedas. Con el trapecio inferior suelto, se pueden sacar los tornillos que fían el eje del mismo y los casquillos. Como el trapecio no va del todo perpendicular a la rueda, para poder sacar dicho eje por la parte trasera hay que sacar el cárter del motor y levantar éste porque no hay bastante sitio. Ya que sacamos el cárter le pondremos una junta nueva, evitando posibles focos de pequeñas fugas.
Una vez que tenemos los brazos desmontados, se pueden introducir los casquillos nuevos; estos realmente son un tubo de hierro envueltos en un envolvente de goma que actúa como elemento elástico; para introducirlos en sus orificios antes hay que embadurnarlos con polvos de talco y ayudarse de una prensa hidráulica para meterlos en su sitio.
En el caso de mi coche las rótulas de la dirección eran nuevas, pero es el momento de sustituir aquéllos elementos que se encuentran mal, al quedar todo fácilmente accesible; también sería el momento de intervenir sobre discos, amortiguadores, etc. al quedar todo fácilmente accesible.
También queda muy accesible la cremallera de la dirección, de las pocas cosas nuevas en mi caso: comprobamos con estupor que en los tres soportes que la fijan a su soporte faltaban las arandelas de empuje, sustituidas por ¡¡¡¡¡silicona!!!! Desde luego, en la C. O. Jaguar donde le cambiaron la cremallera, se lucieron....
Al examinar toda la instalación comprobamos que uno de los latiguillos que iban a la bomba estaba roto, soltando líquido
; estaba hinchado, endurecido y agrietado, no dudo que fuera el original. Como digo yo, menos mal que empezó a perder en el taller y no circulando con el coche...¡¡¡ imaginaros las consecuencias de gripar la dirección en un coche como éste, que pesa y corre lo suyo
!!!! Estos latiguillos están descatalogados en la Jaguar, pero se pueden aprovechar los racores metálicos de empalme; cualquier casa de recambios especializada en latiguillos puede hacer unos nuevos sin problemas.
También hemos aprovechado para limpiar el serpentín del radiador que mantiene la temperatura del líquido de la servodirección a una temperatura razonable. Para mí ha sido una novedad descubrir un radiador para refrigerar el líquido de la servo, porque coches que llevan instalaciones parecidas prescinden del mismo; es una muestra del buen diseño de Jaguar: desde el punto de vista de la ingeniería la mecánica es una preciosidad, aunque la ejecución (pensando en la ergonomía del operario que tiene que encargarse de trabajar con el coche) y la calidad de los materiales desmerecen algo el conjunto.
Después de todo esto, al haber desmontado todo los elementos que intervienen en la dirección, y al haberse modificado sus cotas habrá que alinear, y de paso equilibrar las ruedas; están para cambiar en un futuro próximo, pero hasta que les llegue el momento hay que llevarlas en el mejor estado posible.
Es una faena pesada, que exige esfuerzo y tiempo, pero la seguridad y la suavidad de conducción ganan muchos puntos; además, dejando éstos elementos en buen estado, te despreocupas durante unos cuantos años de ellos.
En todo caso, al igual que ya os he comentado en algún otro hilo, se trata de elementos que normalmente no se ven, no se les hace caso, no se les presta ningún tipo de mantenimiento, pero que también se degradan y acusan el paso de los años o la falta de uso, y que pueden comprometer la seguridad del coche, y por supuesto, el confort de marcha. Vamos, que cuando tengáis la oportunidad echarle un vistado a los bajos de vuestros gatitos para ver cómo se encuentran estos latiguillos, silentblocks, rótulas, etc. ¡Mi coche pasó la ITV sin problemas estando como estaba..., de modo que el haberla pasado no significa por sí mismo que por ahí abajo esté todo perfecto!
Ya os iré poniendo fotos ilustrativas de estas tareas.
Saludos,
Juan
Os comento las últimas cosas que le hemos hecho al coche:
En esta ocasión hemos vuelto a la suspensión delantera, en particular a los casquillos de goma sobre los que gira el eje del brazo inferior de la suspensión; estos casquillos (lleva dos por cada brazo) estaban muy degradados y puede que fueran la causa de las molestas vibraciones que se transmitían al volante; yo pensé que estaban causados por el estado de las ruedas, algo deformadas y rígidas por la falta de uso, pero viendo su estado creo que algo tendrán que ver. Cuando saque el coche del taller, y tras alinear y equilibrar las ruedas podré rodarlo para comprobar si desaparece o no esta vibración. Mi BMW tuvo síntomas parecidos y reemplazando todos los silentblocks el cambio fue notable, con la dirección más fina y suave.
Para sacar estos casquillos nos ha tocado desarmar completamente la suspensión y dirección: nos ha tocado sacar ruedas, muelles, amortiguadores, desmontar bieletas de la dirección, y manetas de las ruedas. Con el trapecio inferior suelto, se pueden sacar los tornillos que fían el eje del mismo y los casquillos. Como el trapecio no va del todo perpendicular a la rueda, para poder sacar dicho eje por la parte trasera hay que sacar el cárter del motor y levantar éste porque no hay bastante sitio. Ya que sacamos el cárter le pondremos una junta nueva, evitando posibles focos de pequeñas fugas.
Una vez que tenemos los brazos desmontados, se pueden introducir los casquillos nuevos; estos realmente son un tubo de hierro envueltos en un envolvente de goma que actúa como elemento elástico; para introducirlos en sus orificios antes hay que embadurnarlos con polvos de talco y ayudarse de una prensa hidráulica para meterlos en su sitio.
En el caso de mi coche las rótulas de la dirección eran nuevas, pero es el momento de sustituir aquéllos elementos que se encuentran mal, al quedar todo fácilmente accesible; también sería el momento de intervenir sobre discos, amortiguadores, etc. al quedar todo fácilmente accesible.
También queda muy accesible la cremallera de la dirección, de las pocas cosas nuevas en mi caso: comprobamos con estupor que en los tres soportes que la fijan a su soporte faltaban las arandelas de empuje, sustituidas por ¡¡¡¡¡silicona!!!! Desde luego, en la C. O. Jaguar donde le cambiaron la cremallera, se lucieron....

Al examinar toda la instalación comprobamos que uno de los latiguillos que iban a la bomba estaba roto, soltando líquido


También hemos aprovechado para limpiar el serpentín del radiador que mantiene la temperatura del líquido de la servodirección a una temperatura razonable. Para mí ha sido una novedad descubrir un radiador para refrigerar el líquido de la servo, porque coches que llevan instalaciones parecidas prescinden del mismo; es una muestra del buen diseño de Jaguar: desde el punto de vista de la ingeniería la mecánica es una preciosidad, aunque la ejecución (pensando en la ergonomía del operario que tiene que encargarse de trabajar con el coche) y la calidad de los materiales desmerecen algo el conjunto.
Después de todo esto, al haber desmontado todo los elementos que intervienen en la dirección, y al haberse modificado sus cotas habrá que alinear, y de paso equilibrar las ruedas; están para cambiar en un futuro próximo, pero hasta que les llegue el momento hay que llevarlas en el mejor estado posible.
Es una faena pesada, que exige esfuerzo y tiempo, pero la seguridad y la suavidad de conducción ganan muchos puntos; además, dejando éstos elementos en buen estado, te despreocupas durante unos cuantos años de ellos.
En todo caso, al igual que ya os he comentado en algún otro hilo, se trata de elementos que normalmente no se ven, no se les hace caso, no se les presta ningún tipo de mantenimiento, pero que también se degradan y acusan el paso de los años o la falta de uso, y que pueden comprometer la seguridad del coche, y por supuesto, el confort de marcha. Vamos, que cuando tengáis la oportunidad echarle un vistado a los bajos de vuestros gatitos para ver cómo se encuentran estos latiguillos, silentblocks, rótulas, etc. ¡Mi coche pasó la ITV sin problemas estando como estaba..., de modo que el haberla pasado no significa por sí mismo que por ahí abajo esté todo perfecto!
Ya os iré poniendo fotos ilustrativas de estas tareas.
Saludos,
Juan